Bután celebra el nacimiento de su heredero plantando 108.000 árboles

Los habitantes de Bután se toman la conservación del medio ambiente muy en serio y por ley el 60 por ciento del país debe ser siempre terreno forestal.

En un país tan preocupado por la naturaleza como este, el mejor regalo que se podía hacer al recién nacido príncipe Gyalsey no podía ser otro que 108.000 árboles nuevos.
Muchos de los residentes en Bután son budistas y para el budismo los árboles son símbolos de una vida larga, salud, belleza y compasión.

Dasho Karma Raydi, uno de los voluntarios que cuidan de los árboles comentó a la cadena BBC: «Estamos cultivando ahora a los árboles y es como si estuviéramos haciendo lo mismo con el pequeño príncipe».

Esta no es la primera vez que en Bután realizan una plantación masiva como esta. En 2015 este mismo país batió un récord Guinness platando 50.000 árboles en solo una hora.