“Los médicos nos miraron con compasión y dijeron, ‘No se la tienen que llevar. Sabemos que esto no es por lo que firmaron'”
Allison Lewis
Por César Ruiz
Allison y Josh Lewis se conocieron en el colegio y rápidamente se enamoraron. En el 2000 se casaron y tuvieron 4 hijos y adoptaron a uno más. Su familia estaba completa, o al menos eso es lo que ellos creían, pero la vida les puso una complicada prueba que día tras día han ido superando.
En 2015, justo en el cumpleaños número 30 de Allison, ella recibió una llamada de un amigo quien también es un abogado que trata temas de adopción. Él sabía que ellos habían contemplado la posibilidad de adoptar una vez más. Les dijo que había una mujer embarazada que no iba a poder quedarse con su hijo y les preguntó si estaban interesados. La pareja respondió con un sí rotundo.
El día del parto, la familia iba rumbo al hospital en Carolina del Norte cuando recibió una llamada del amigo: “¿Josh tiene las dos manos en el volante?”, preguntó. La noticia era importante.
Por si una noticia tan grande no fuera suficiente, al poco tiempo el abogado llamó otra vez.
En esta ocasión su tono de voz era diferente. “Lamento decirles esto
(…) los médicos piensan que el segundo bebé no sobrevivirá”.
Ellos pasaron 3 semanas en ese hospital muy lejos de casa cuidando a la niña, cuando estuvo suficientemente estable, volaron hacia su hogar para internarla en el hospital local. Después de 44 días, Ava Leigh Lewis por fin fue a casa con su familia.
La mamá le contó a The Little Things que ellos hablaron abiertamente del tema con los demás niños. Ellos saben que la vida de su hermana será muy corta, “pero ellos saben que tenemos un montón de amor en un corto periodo de tiempo”.
Allison Lewis
Por César Ruiz
Allison y Josh Lewis se conocieron en el colegio y rápidamente se enamoraron. En el 2000 se casaron y tuvieron 4 hijos y adoptaron a uno más. Su familia estaba completa, o al menos eso es lo que ellos creían, pero la vida les puso una complicada prueba que día tras día han ido superando.
En 2015, justo en el cumpleaños número 30 de Allison, ella recibió una llamada de un amigo quien también es un abogado que trata temas de adopción. Él sabía que ellos habían contemplado la posibilidad de adoptar una vez más. Les dijo que había una mujer embarazada que no iba a poder quedarse con su hijo y les preguntó si estaban interesados. La pareja respondió con un sí rotundo.
El día del parto, la familia iba rumbo al hospital en Carolina del Norte cuando recibió una llamada del amigo: “¿Josh tiene las dos manos en el volante?”, preguntó. La noticia era importante.
Les informó que no nacería solo un bebé, en realidad eran dos.
“Siempre me cuesta describir las emociones que teníamos en ese momento. Era algo parecido al éxtasis, deleite, abrumados, aterrados”.
-Allison-
Así que cuando llegaron al hospital encontraron dos cosas. Un saludable bebé abrazando a las enfermeras y en contraste, una pequeña en cuidados intensivos que había nacido sin cerebro.
“Los médicos nos miraron con compasión y dijeron, ‘No se la tienen que llevar. Sabemos que esto no es por lo que firmaron'”.
-Allison-
Tanto Allison como Josh dijeron al mismo tiempo: “Es nuestra hija”.
Ellos pasaron 3 semanas en ese hospital muy lejos de casa cuidando a la niña, cuando estuvo suficientemente estable, volaron hacia su hogar para internarla en el hospital local. Después de 44 días, Ava Leigh Lewis por fin fue a casa con su familia.
“Elegir que Ava sea nuestra hija fue una de las cosas más ‘difícilmente fáciles’ que hemos hecho. Tenemos múltiples visitas a la semana de su equipo de cuidados (…) sus visitas son un recordatorio de que la vida de Ava en la tierra probablemente terminará mucho antes”.
La mamá le contó a The Little Things que ellos hablaron abiertamente del tema con los demás niños. Ellos saben que la vida de su hermana será muy corta, “pero ellos saben que tenemos un montón de amor en un corto periodo de tiempo”.
No comments:
Post a Comment